domingo, 31 de marzo de 2013

PASCUA: HA RESUCITADO





JUAN 20, 1-9

El primer día de la semana, por la mañana temprano, todavía en tinieblas, fue María Magdalena al sepulcro y vio la losa quitada. Fue entonces corriendo a ver a Simón Pedro y también al otro discípulo, el predilecto de Jesús, y les dijo:

- Se han llevado al Señor del sepulcro y no sabemos dónde lo han puesto.

Salió entonces Pedro y también el otro discípulo y se dirigieron al sepulcro. Corrían los dos juntos, pero el otro discípulo se adelantó, corriendo más de prisa que Pedro, y llegó primero al sepulcro. Asomándose vio puestos los lienzos; sin embargo, no entró.

Llegó también Simón Pedro siguiéndolo, entró en el sepulcro y contempló los lienzos puestos, y el sudario, que había cubierto su cabeza, no puesto con los lienzos, sino aparte, envolviendo determinado lugar. Entonces, al fin, entró también el otro discípulo, el que había llegado primero al sepulcro, vio y creyó.

Es que aún no habían entendido aquel pasaje donde se dice que tenía que resucitar de la muerte

Desconcierto. Es lo primero que provoca en María Magdalena. Y en nosotros. Jesús no está en el sepulcro. Lo han robado. Es la reacción natural, racional, lógica. ¿Dónde está?

Comunicación a los demás. Es lo que hace María. Quiero que los demás lo sepan. Y estos mismos quieren comprobarlo. Acuden al sepulcro y encuentra el sudario y los lienzos, pero no el cuerpo de Jesús. Aturdimiento.

Meditación y Silencio. Hay que preguntarse por lo que acaban de ver. ¿Qué ha pasado? No entienden. Se encuentran con el sepulcro vacío. Esa es la realidad visible. Y dice el evangelio: Es que aún no habían entendido aquel pasaje donde se dice que tenía que resucitar de la muerte.

Ha resucitado. Esta es la realidad a la que llegan porque, tras el silencio, comprenden las palabras de Jesús que les había anunciado su resurrección. No sabían qué era eso de la resurrección, quizás no se lo creían del todo. Pero ahora se encuentran con la verdadera realidad: Jesús ha resucitado. Sigue entre nosotros en otro estado, invisible a la materia, real a la persona entera.

Felicidad. Es la consecuencia de haber descubierto la verdad de la resurrección.

Y esto que hemos visto con Jesús, igualmente nos pasará a cada uno de nosotros. Hemos tenido un nacimiento y tendremos una muerte, pero seremos siempre vida, porque la muerte no es el fin sino el cambio en la forma de ser, en la manera de estar. Es tomar otro estado donde solo es posible la felicidad.



En el trajín de cada día me agoto

Las preocupaciones llenan mi vida

Corro de aquí para allá para hacer y hacer

Pongo toda mi fuerza en que salga bien

La rabia a veces entra en mí

Me quejo de lo mal que van muchas cosas

Protesto si no consigo lo que me propongo

Detesto el mal y no lo entiendo

…/…

Y hoy pienso en la resurrección

En ese vivir eterno en felicidad

Y sonrío y sonrío y sonrío…

Podré estar en él porque ya nací

Ya soy eterno porque Tú me has hecho así

Gracias, Jesús.

sábado, 30 de marzo de 2013

SABADO SANTO: HAY ESPERANZA





Jesús ha desaparecido. Le hemos matado. Molestaba. Criticaba a los que mandaban. Se acercaba a los más débiles. No interesaba a los que mandaban, a los instalados, a los seguros de saber hacer lo que siempre se ha hecho.

¿Y ahora qué? Todo parece vacío. No hay nada. Los que mandaban han triunfado.

Pero, El dijo que resucitaría. ¿Qué es eso? ¿Lo entiendo?

Es vivir. Es seguir amando. ¿Cómo?

Tenemos esperanza. El dijo que viviría. No nos puede fallar. No nos va a fallar.

Hoy sigue habiendo pobres, necesitados, personas que esperan algo de nosotros. Parece que El ya no está, le hemos matado. Pero dijo que resucitaría.

No podemos perder la esperanza.

En este sábado santo tenemos que seguir rezando. Hoy más que nunca. Porque hay que seguir conservando la esperanza. Invitamos a todos los que pasen por el blog que hoy recen por la esperanza. Porque Jesús nos dijo que iba a seguir con nosotros. Aunque no lo entendamos recemos por la esperanza. ¡¡Que nadie falte a la vigilia pascual!! Se hace realidad la esperanza.

H y MN

viernes, 29 de marzo de 2013

VIERNES SANTO: PASION Y MUERTE





¡Cómo me cuesta entender esto! ¿Por qué tuvo que ser así? ¿Por qué tiene que seguir siendo así? ¿Tan malos somos los hombres? ¿Por qué ya no solo la muerte sino el calvario?

Le damos vueltas y vueltas. Lo pensamos, lo rezamos, le meditamos.

¡Qué difícil resulta aceptarlo!

¡Dios muerto por los hombres!

Pero no quedó ahí: Dios muerto para los hombres.

¡¡Claro que ahora lo entiendo!!

Es la mayor manifestación de amor. ¡¡Tanto nos ama Dios!!

Entregar hasta la misma vida. Todo por amor. Todo para amar. Dios ha amado hasta el extremo a los hombres. Sigue amando. El es amor. Nosotros somos amor.

Desde ahí la vida es maravillosa. Hay cruz, hay dolor, pero hay amor.

En este día de viernes santos, invitamos a nuestros amigos del blog a hacer una oración de alabanza a Jesús, porque nos ama hasta el extremo de la muerte.

H y MN

jueves, 28 de marzo de 2013

JUEVES SANTO: DÍA DEL AMOR FRATERNO



Queridos amigos: Hoy se nos dice que el Jueves Santo, es el Día del Amor Fraterno. Y nuestro nuevo papa Francisco dice que el poder es el servicio humilde y gratuito a los demás. Pero todos sabemos que el mayor poder: el servicio, viene a través del amor, porque lo que el amor no consiga no lo va a conseguir la fuerza. Por eso el que ama tiene mucho poder y a su vez el que ama siempre está al servicio de los más necesitados.

¿ Y qué hizo Jesús en este día? Pues realmente fueron gestos muy sencillos. Lo primero reunirse con sus amigos y cenar juntos. Nosotros también deberíamos en un día como éste reunirnos con los amigos. Pero no sólo eso, también con los que nos gustan menos, como hizo Jesús, que cenó con Judas.

Por eso la frase que se nos dice en el evangelio es tan bonita:

Jesús, habiendo amado siempre a los suyos, los amó hasta el extremo… Claro, Jesús así nos mostró hasta donde nos amaba.

Pero nosotros nos preguntamos ¿Qué nos pides a cambio de ese enorme gesto de amor? Pues otra vez la sencillez nos inunda: Me contento con que os acordéis de mí, “tomad, tomad y comed, porque esto es mi Cuerpo. Tomad, tomad y bebed, porque esta es mi Sangre... Haced esto como memorial mío”.

Es un momento sublime. Jesús se nos entrega en la Última Cena, para el perdón de los pecados. Muchas veces estamos en situaciones en que no se sabe si perdonar o mantener el rencor. Nuestro papa Francisco nos ha recordado que olvidemos el rencor y Jesús nos enseñó que es el momento del perdón porque éste libera, produce alegría, ensancha el corazón…

Amigos, unámonos y perdonémonos lo que hayamos hecho mal, porque Jesús nos ha enseñado que así es el amor.

Un abrazo
Huellas

miércoles, 27 de marzo de 2013

MIERCOLES SANTO: AMAR EL SILENCIO





El mundo está lleno de ruidos. Las personas van de un lado para otro sin mirarse. Los coches pitan ante el mínimo atasco. Vamos corriendo por la vida.

¿A dónde vamos? ¿Qué buscamos?

Las caras de las perdonas están tensas, no llega el sueldo a fin de mes, los hijos no obedecen ni hacen lo que le decimos los padres, el trabajo es cada día un bien más escaso, los despidos colectivos están a la orden del día, los bancos han restringido el crédito, los vecinos que viven en comunidades no se conocen, las iglesias cada vez están más vacías…

¿Qué está pasando?

Hoy, en este día de miércoles santo, invitamos al silencio. Para un poco. Deja de correr. Busca un rato para el silencio. Media hora. Quince minutos. Solo en el silencio. Y, ahí, deja de pensar, que no inunde tu mente los pensamientos. Déjalos que entren y se marchen. No busques nada. Solo el silencio. Ahí vas a encontrar la calma, el sosiego. Ahí vas a ver desde el alma. Ahí te vas a sentir unido a Dios. Ahí vas a ver cómo Dios ya está dentro de ti. Y encontrarás la paz.

H y MN

martes, 26 de marzo de 2013

MARTES SANTO: EL DÍA DEL PERDÓN





No hay vida feliz sin perdón. Aprender a perdonar es aprender a ser feliz. Todos somos conscientes de nuestras limitaciones, de que, de vez en cuando, cometemos errores. Es connatural a nuestra condición de persona limitadas. Saber esto ya es saber bastante.

Es necesario darse cuenta de que, cuando fallamos, no perdemos nuestro valor como personas, seguimos siendo seres únicos, irrepetibles, valiosos y queridos. Aunque nuestras acciones dejen mucho que desear.

Pero, cuidado, es necesario conocer nuestros fallos porque solo así podremos superarlos. Los miembros de los Equipos tenemos en la regla de vida un medo idóneo para vencer y trabajar contra esos fallos. La persona sensata y sabia sabe reconocerlos y salir de ellos.

El camino para hacerlo es saber pedir perdón. Esto es un arte que se aprende. Requiere destreza, Comenzando por darse cuenta del error, dar un paso y decirle a aquel a quien le hayamos molestado: te pido perdón. Así de sencillo. Y así de difícil, muchas veces.

También hay que saber perdonar. Por fuerte que haya sido el daño, hay que saber perdonar. Como lo hizo el padre bueno en la parábola del hijo pródigo. Acogió, abrazó y dio una fiesta. Así tenemos que hacer nosotros: llegar a ser padres buenos y acogedores. Esta es la auténtica conversión.

Hoy, martes santo, que nuestra oración a Jesús sea para pedir perdón y pasa saber perdonar. Que nos ayude a saber mirar, saber acoger, saber abrazar, saber perdonar.

H y MN

lunes, 25 de marzo de 2013

LUNES SANTO: REZAR POR LA UNIÓN


Todos estamos en las manos de Dios


Somos muchos los que nos llamamos seguidores de Jesús. Su persona, su vida, su forma de vivir, las bienaventuranzas, el amor a todos…es común a todos los cristianos.

Y, sin embargo, incomprensiblemente, seguimos separados. Católicos, ortodoxos, coptos, protestantes… rezamos al mismo Jesús. Cristianos, judíos e islamistas rezamos al mismo Dios. Y, sin embargo, estamos separados.

¿Qué nos pasa? ¿Por qué así?

Se dice, entre las muchas noticias que se publican estos días del papa Francisco, que mantiene muy buenas relaciones con otras ramas de cristianos. Este papa está trayendo nuevas formas a la Iglesia, no se cansa de repetir que ha de ser la Iglesia de los pobres. ¿Será ahí donde todos los cristianos podemos estar juntos?

Y si todos rezamos al mismo Dios, ¿por qué no estamos juntos? ¿No hemos nacido todos del amor de Dios? ¿No ama Dios a todos, a todos? ¿Por qué seguir separados?

En este lunes santo nuestra oración es por la unión. La de todos los cristianos, la de todos los que rezamos al mismo Dios, la de todos los que tienen fe en un creador o la de los que no tienen fe, la de todos los hombres.

Animamos a todos los que pasan por este blog a que en este lunes santo abran sus brazos en la oración para dar la mano a todos los hombres.

H y MN

domingo, 24 de marzo de 2013

DOMINGO DE RAMOS: SOLO SE COMPRENDE DESDE EL AMOR




"El olivar". Pinilla de la Valdería

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Filipenses 2, 6-11

Cristo, a pesar de su condición divina,

no hizo alarde de su categoría de Dios;

al contrario, se despojó de su rango

y tomó la condición de esclavo,

pasando por uno de tantos.

Y así, actuando como un hombre cualquiera,

se rebajó hasta someterse incluso a la muerte,

y una muerte de cruz.

Por eso Dios lo levantó sobre todo

y le concedió el «Nombre–sobre–todo–nombre»;

de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble

en el cielo, en la tierra, en el abismo,

y toda lengua proclame:

Jesucristo es Señor,

para gloria de Dios Padre.



Aunque hemos recogido el texto de la segunda lectura (precioso, condensado, lleno de sabor, profundo, bello y comprometido) hoy en la eucaristía se lee la Pasión de Jesús, según San Lucas. No lo hemos reproducido por su extensión, pero invitamos todos los “blogueros” a que en su casa relean este relato de la Pasión porque ahí está la esencia de por qué Dios se hizo hombre en la persona de Jesús. Es una narración que ha venido precedida por la importancia que Jesús comunicó a los suyos de ir a Jerusalén, porque un profeta no puede morir fuera de Jerusalén (Lc 13,33), la ciudad santa donde se decidían todas las cosas importantes de la religión judía. La Pasión del Señor, aunque aparentemente es una tragedia, es también el acontecimiento del proyecto salvador para todos los hombres. Y es también un testimonio de entrega y de fidelidad a Dios, pero para que Dios fuera siempre el Dios de los hombres.

Jesús nos ha revelado que Dios es un Padre, lleno de ternura y de misericordia. El relato de la Pasión del Evangelista Lucas resalta la confianza en el Padre y la petición de misericordia para los “que no saben lo que hacen” o para el buen ladrón “hoy estará conmigo…”

Jesús es también el que siendo de condición divina, se hizo uno de nosotros para salvarnos. El que establece que “nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos”.

“En esta perspectiva, el Año de la fe es una invitación a una auténtica y renovada conversión al Señor, único Salvador del mundo. Dios, en el misterio de su muerte y resurrección, ha revelado la plenitud del Amor que salva y llama a los hombres a la conversión de vida mediante la remisión de los pecados (Cf. He 5,31)… La “fe que actúa por el amor” (Gál 5,6) se convierte en un nuevo criterio de pensamiento y de acción que cambia toda la vida del hombre”. (Pf, 6)

La celebración del domingo de ramos y nuestra confesión de fe, nos tendría que llevar a dar una verdadera respuesta a la pregunta de Jesús como Pedro, aunque después lo neguemos: “Tú eres el Mesías”. O como el centurión y sus hombres: “Realmente este era Hijo de Dios”.

Que cuando besemos y miremos al Jesús Crucificado ese beso y esa mirada la reconduzcamos hacia quienes, cerca o lejos de nosotros, viven sufriendo y amando.

No tengo palabras ante tanto dolor

La Pasión de Jesús me estremece

Hay rabia suelta para hacerle sufrir

Hay ganas malvadas para escarmentarlo

¿Quién es El, acaso DIOS?

Se atrevió a poner el amor por encima de la ley

Se atrevió a ser amigo de los vagabundos y de los pecadores

Puso en entredicho el cumplimiento religioso

¿Quién es El para hacer esto?

No entendieron nada, por eso te mataron

Pero tu muerte dio sentido a todo: amar hasta el final

Gracias Jesús


Nota: del olivar se cortan los ramos de olivo con dan belleza a la procesión de este Domingo de Ramos por las calles de Pinilla de la Valdería. Como en tantos lugares del mundo entero, con ramos de olivo, de laurel o palmas. Es el comienzo de una fiesta que, tras la pasión, acabará en la gran fiesta de la resurrección.

sábado, 23 de marzo de 2013

¿DE DÓNDE VIENEN LOS BEBÉS PELIRROJOS?



Nació un bebé pelirrojo y el padre, fue a hablar con el médico.

"Doctor, estoy preocupado porque mi hija nació con el cabello rojo. No puede ser mía!!!"

"Qué disparate!" dijo el médico. "Aunque usted y su mujer tengan el pelo negro, pueden tener cabello rojo en los genes de sus familias".

"No es posible!" insistió el padre. "Ambas familias han tenido el pelo negro desde hace muchas generaciones".

"Bien", pregunta el médico "Con qué frecuencia usted y su mujer practican el sexo?".

El hombre, avergonzado, respondió: "Este año he andado cansado de tanto trabajar. Sólo hicimos el amor una o dos veces en los últimos meses".

"Entonces... ahí está!" dice el médico confiado. "ES ÓXIDO!!!".

viernes, 22 de marzo de 2013

SABIDURÍA TOLTECA. NO TE TOMES NADA PERSONALMENTE



3º.- LA SABIDURÍA TOLTECA. No te tomes nada personalmente.

Los toltecas eran conocidos en todo el sur de México como “hombres y mujeres de conocimiento”. Los antropólogos los han definido como una nación o una raza, pero de hecho eran científicos y artistas con un profundo conocimiento espiritual. La conquista europea, junto con errores propios, hizo que los toltecas – naguales – escondieran su sabiduría y la ocultaran a los demás.

Nos proponemos a dar a conocer esta sabiduría a través del Doctor Miguel Ruiz y de sus libros “Los Cuatro acuerdos”, la “Maestría del amor” y “El quinto acuerdo”.

LOS CINCO ACUERDOS para ser feliz:

1º. Sé impecable con tus palabras.

2º.-No te tomes nada personalmente.

3º.- No hagas suposiciones.

4º.- Haz siempre lo máximo que puedas.

5º.- Sé escéptico, pero aprende a escuchar

Vamos a explicar hoy el segundo acuerdo: Suceda lo que suceda a tu alrededor no te lo tomes personalmente.

“Si te tomas personalmente las cosas es porque estás de acuerdo con cualquier cosa que se diga. Y tan pronto como estás de acuerdo, el veneno te recorre y te encuentras atrapado en el sueño del infierno. El motivo de que estés atrapado es lo que llamamos «la importancia personal». La importancia personal, o el tomarse las cosas personalmente, es la expresión máxima del egoísmo, porque consideramos que todo gira a nuestro alrededor. Durante el período de nuestra educación (o de nuestra domesticación), aprendimos a tomarnos todas las cosas de forma personal. Creemos que somos responsables de todo. ¡Yo, yo, yo y siempre yo! Nada de lo que los demás hacen es por ti. Lo hacen por ellos mismos.


Si alguien te da su opinión y te dice: «¡Oye, estás muy gordo!», no te lo tomes personalmente, porque la verdad es que se refiere a sus propios sentimientos, creencias y opiniones. Esa persona intentó enviarte su veneno, y si te lo tomas personalmente, lo recoges y se convierte en tuyo. Tomarse las cosas personalmente te convierte en una presa fácil para esos depredadores, los magos negros.... Te comes toda su basura emocional y la conviertes en tu propia basura. Pero si no te lo tomas personalmente, serás inmune a todo veneno aunque te encuentres en medio del infierno


Lo que pienses de mí no es importante para mí y no me lo tomo personalmente. Cuando la gente me dice: «Miguel, eres el mejor», no me lo tomo personalmente y tampoco lo hago cuando me dice: «Miguel, eres el peor». Sé que cuando estés contento, me dirás: «¡Miguel, eres un ángel!». Pero cuando estés enfadado conmigo, me dirás: «¡Oh, Miguel, eres un demonio! Eres repugnante. ¿Cómo puedes decir esas cosas?». Ninguno de los dos comentarios me afecta porque yo sé lo que soy. No necesito que me acepten. No necesito que nadie me diga: «¡Miguel, qué bien lo haces!», o: «¿Cómo eres capaz de hacer eso?».


Sea lo que sea lo que la gente haga, piense o diga, no te lo tomes personalmente. Si te dice que eres maravilloso, no lo dice por ti. Tú sabes que eres maravilloso. No es necesario que otras personas te lo digan para creerlo. No te tomes nada personalmente.


No te tomes nada personalmente porque, si lo haces, te expones a sufrir por nada. Los seres humanos somos adictos al sufrimiento...


No tomar nada personalmente te ayuda a romper muchos hábitos y costumbres que te mantienen atrapado en el sueño del infierno y te causan un sufrimiento innecesario. Si mantienes este acuerdo, viajarás por todo el mundo con el corazón abierto por completo y nadie te herirá. Dirás: «Te amo», sin miedo a que te rechacen o te ridiculicen. Pedirás lo que necesites. Dirás sí o dirás no -lo que tú decidas- sin culparte ni juzgarte. Siempre puedes seguir a tu corazón. Si lo haces, aunque estés en medio del infierno, experimentarás felicidad y paz interior”. ( Miguel Ruiz)


Amigo internauta, déjanos tus aportaciones en “colaboraciones”.

jueves, 21 de marzo de 2013

LA VARIEDAD




Hemos venido a un mundo donde prevalece la diversidad. Pero nos empeñamos en no aceptarlo. Hace unos días alguien en una reunión dijo que los que estábamos allí nos queríamos porque pensábamos igual. Quisimos haber respondido ya en aquél momento, pero no pudo ser porque había más personas que querían hablar.

La manera de pensar no tiene nada que ver con el amor. Todos queremos muchísimo a nuestros hijos y la mayor parte de las veces no piensan como nosotros. Es más en aquella reunión había muchas personas con las que posiblemente no podríamos hablar de muchos temas porque se escandalizarían de nuestros pensamientos. Y a pesar de todo nos queremos.

El mundo tiene una diversidad inmensa de caracteres, personas, ideas… es un mundo de colores y por mucho que queramos hacerlo en blanco y negro no se puede.

Por eso debemos aprender a aceptar a los que piensan distinto, son distintos… porque son personas a las que querer, como hace nuestro buen Padre Dios. Él nos hizo a todos distintos y así nos quiere. Conseguir que esto sea así, es un camino difícil, pero no olvidemos que hay un pensamiento que dice:

El camino es siempre mejor que la posada

El camino es más movido, más variado, más atrayente por la novedad de cada día. No nos queramos quedar en la posada donde las habitaciones son siempre iguales, aburridas y donde falta la vida.

No damos ejemplo de amor cuando no escuchamos lo que nos dicen los que son distintos a nosotros física o espiritualmente. Y desde estas premisas no podemos llegar a nadie. Jesús se acercaba a todos, fuesen como fuesen, para amarlos. Ojalá hagamos nosotros lo mismo para ser creíbles y que nos escuchen. El mundo tiene muchos colores, no queramos vivirlo en blanco y negro.

Un abrazo

Huellas



miércoles, 20 de marzo de 2013

EL PEQUEÑO PEZ




"Usted perdone", le dijo un pez a otro, "es usted más viejo y con más experiencia que yo y probablemente podrá usted ayudarme. Dígame: ¿dónde puedo encontrar eso que llaman Océano? He estado buscando por todas partes, sin resultado".

"El Océano", respondió el viejo pez, "es donde estás ahora mismo". "

¿Esto? Pero si esto no es más que agua... Lo que yo busco es el Océano", replicó el joven pez, totalmente decepcionado, mientras se marchaba nadando a buscar en otra parte.

Se acercó al Maestro, vestido con ropas sannyasi y hablando el lenguaje de los sannyasi: "He estado buscando a Dios durante años. Dejé mi casa y he estado buscándolo en todas las partes donde El mismo ha dicho que está: en lo alto de los montes, en el centro del desierto, en el silencio de los monasterios y en las chozas de los pobres".

"¿Y lo has encontrado'", le preguntó el Maestro.

"Sería un engreído y un mentiroso si dijera que sí. NO; no lo he encontrado. ¿Y tú?"

¿Qué podía responderle el Maestro? El sol poniente inundaba la habitación con sus rayos de luz dorada. Centenares de gorriones gorjeaban felices en el exterior, sobre las ramas de una higuera cercana. A lo lejos podía oírse el peculiar ruido de la carretera. Un mosquito zumbaba cerca de su oreja, avisando que estaba a punto de atacar... Y sin embargo aquel buen hombre podía sentarse allí y decir que no había encontrado a Dios, que aún estaba buscándolo.

Al cabo de un rato, decepcionado, salió de la habitación del Maestro y se fue a buscar a otra parte.

* * *

Deja de buscar, pequeño pez. No hay nada que buscar. Sólo tienes que estar tranquilo, abrir tus ojos y mirar . No puedes dejar de verlo.

martes, 19 de marzo de 2013

ME ABRÍ A LA VIDA



A fuerza de insistir conseguí que vinieras por casa. No te apetecía tomar ninguno de los diversos tés que te ofrecía. Me dijiste que te apetecía andar, junto al río, disfrutando de la naturaleza, a punto de brotar en esta primavera que ya asoma.

Uno a uno fue desgranando, como si se tratara de una mazorca de maíz, los pesares de mi alma, aquellas cosas que me hacían sentir pesado, triste o enredado en mil tonterías. Te conté que iba a empezar a poner límites en mi vida y parar esa loca carrera de entrar en cada tienda de colores. Te hablé de mi necesidad de escribir todas las cosas importantes que estaba viviendo y de hacer algunas llamadas pendientes. Me costé decirte que llevaba un par de odios en mi mochila que me agarraban al estómago y me imposibilitaban disfrutar de la comidas. Te hablé de él y cómo había entrado en mi vida y me sentía bloqueada para acercarme y darle las gracias o invitarle a una copa o preguntarle por su último poema.

Por aquella verada asfaltada fui soltando mis miedos, como los árboles van soltando las hojas a su tiempo.

¡Nunca había visto unos árboles tan hermosos!.

lunes, 18 de marzo de 2013

MI NIÑO PEQUEÑO



Hoy mi niño pequeño está revuelto. En el supermercado se tiró al suelo y me ruboricé al verle patalear. En casa se negó a probar la comida y rehusó el bocadillo de la merienda. Sus deberes han quedado sin hacer.

Está triste. Había hecho un buen partido en el cole y esperaba que sus amigos le levantaran en bolandas, pero sus amigos se fueron corriendo para casa y se olvidaron de felicitarle. En clase de dibujo el profesor le llamó la atención por sus dibujos naif, él había pedido dibujar cientos de esferas de colores. A él le aburría hacer círculos repetidos. Un par de compañeras le dijeron que no le gustaban las pecas de su cara. “¡A mí tampoco me gustan sus...!”

Se siente herido, rabiado, incomprendido. No para de lanzar patadas al colchón y de romper unos cuantos cuadros de pintura naif.

Mi niño pequeño está confundido, de mal humor y se ha encerrado en su habitación. Quisiera salir del escenario de esta película.

Me quedé en casa para estar con él, acoger sus lágrimas y aguantar sus envites. Después de una dura pelea, me miró de frente y me dijo cosas bonitas a la cara. Aquella escena acabó en un abrazo más allá de la piel.

Al día siguiente supe que habíamos dormido toda la noche LOS DOS

domingo, 17 de marzo de 2013

TAMPOCO YO TE CONDENO



Catedral de Santo Domingo. República Dominicana.


Domingo V de Cuaresma
Evangelio de Juan 8, 1-11

En aquel tiempo, Jesús se retiró al monte de los Olivos. Al amanecer se presentó de nuevo en el templo y todo el pueblo acudía a él y, sentándose, les enseñaba.

Los letrados y fariseos le traen una mujer sorprendida en adulterio y, colocándola en medio, le dijeron:

― Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio. La Ley de Moisés nos manda apedrear a las adúlteras: tú, ¿qué dices?

Le preguntaban esto para comprometerlo y poder acusarlo.

Pero Jesús, inclinándose, escribía con el dedo en el suelo.

Como insistían en preguntarle, se incorporó y les dijo:

― El que de vosotros esté sin pecado, que le tire la primera piedra.

E inclinándose otra vez, siguió escribiendo.

Ellos, al oírlo, se fueron escabullendo uno a uno, empezando por los más viejos, hasta el último.

Y quedó solo Jesús, y la mujer en medio, de pie.

Jesús se incorporó y le preguntó:

― Mujer, ¿dónde están tus acusadores?, ¿ninguno te ha condenado?

Ella contestó:

― Ninguno, Señor.

Jesús le dijo:

― Tampoco yo te condeno. Anda, y en adelante no peques más.



El evangelio es un espacio para la esperanza, la paz y el amor. Jesús, cada día, nos invita a la cercanía, al cariño, al amor. El relato de hoy es un vivo ejemplo.

Por un lado, los acusadores. Todos lo somos muchas veces. ¡Qué manía de adoptar ese comportamiento! Pero, cuando te ponen delante un espejo y te miras a la cara, ¿Quién no se da cuenta de que también comete errores? Ahí, ante el espejo, tu solo, ves tu corazón limitado y comprendes que no eres mejor de ese a quien acusas y te retiras, avergonzado.

Por otro lado, la actitud de Jesús. Sabe que esa persona no ha hecho bien, pero la perdona. ¡¡Menos mal!! Jesús, es misericordioso. En este comportamiento Jesús nos hace ver la distinción entre la acción reprobable y la persona que la comete, que merece cariño, comprensión y acogida. “Yo, tampoco te condeno. Vete y no peques más”.



Cuando veces me empeño en fijarme en lo que hacen los demás,

Y descubro faltas y faltas, errores y errores,

¡Qué afilada tengo la vista para verlos!

Pero, cuando me pongo delante de Ti, mi Dios,

Eso no me vale, porque me preguntas por mí,

¿qué has hecho con las cualidades que te he dado?

¿quién eres tu para exigir y para condenar a los demás?

¿qué sabes tu de lo que hay en el interior de esa persona?

Me quedo triste: quiero tapar mis defectos poniendo encima los de los demás.

Pero, entre tu y yo, solo estamos los dos.

Y siento tu abrazo.



sábado, 16 de marzo de 2013

ALEGRÍA ESPERANZA...

Quiero mudarme hace años al Barrio de la alegría
y arribar en la estación insegura de la esperanza.

Que no perdamos ese tren que pasa por nuestra vida.
Mejor: hagamos alegría de la vida.


 

viernes, 15 de marzo de 2013

¿SABEMOS ESCUCHAR Y MIRAR?




Hace unos días en una Eucaristía se nos preguntó qué es lo que acababan de leer de la lectura de la Palabra, y el gran asombro es que casi nadie recordaba todas las lecturas. Unos recordaban la primera, otros la segunda, y algunos nada.

Es significativo, porque los que estábamos allí no íbamos obligados, es más, íbamos con mucho gusto y con ganas de escuchar, pero la realidad fue que no lo hicimos.

Esto nos hace plantearnos el porqué.

Quizá porque hemos caído en la rutina de que siempre sea lo mismo, las mismas formas, las mismas cadencias… En cuanto entramos a una Eucaristía parece que hemos bloqueado la mente y no escuchamos.

También puede ser que tenemos la mente en muchos sitios a la vez, y cuando encontramos un rato de silencio o de tranquilidad nuestra mente se va a otros lugares que nos llaman y que por el bullicio de la vida no nos ha permitido que nos detengamos en ello.

O puede ser que nos suene a sabido, aunque no a vivido y no queremos oírlo.

Esto nos hace pensar que si queremos una nueva evangelización hemos de salirnos de la rutina, de las palabras que repetimos continuamente pero que no se nota que creamos en ellas.

“Lo más importante es el amor”, decimos, pero después ponemos frenos a los distintos tipos de amor. O “tenemos que aceptarnos como somos para crecer”, pero a algunas personas las decimos que no pueden ser como son, porque no entran en nuestras categorías cristianas.

Hagamos que las palabras coincidan con los hechos y la nueva evangelización se pondrá en marcha. Y perdamos el miedo, porque es lo que nos tiene paralizados.

Un abrazo

Huellas

jueves, 14 de marzo de 2013

PAPA FRANCISCO



Papa Francisco


Todos los medios del mundo, desde ayer a las ocho de la tarde dan la noticia de la elección del nuevo papa Francisco, Jorge Mario Bergoglio, cardenal argentino.

Confieso que estaba en mis labores habituales de las tardes y a eso de las siete y diez de la tarde me entero de que ya hay nuevo papa. Desde esa hora, pegado a la tv, estuve esperando conocer quién era. Una vez más las quinielas no han acertado. Pocos, muy pocos citaban entre los papables al cardenal Bergoglio. Por lo que he oído después, parecía como si ya se hubiera pasado su tiempo. Tiene 76 años.

Fue todo un poco confuso. El cardenal encargado de anunciar al nuevo papa se le oyó mal, dio la noticia y se retiró. Yo esperaba que el nuevo papa saliese inmediatamente. Pero tardó unos minutos. Incluso se cerró la cortina. ¿Qué pasaba? Después de un rato, de seguir interiorizando la sorpresa del elegido, por fin aparece Francisco, el nuevo papa. Y nueva sorpresa. Parece que está hierático, asustado, que no habla, la mirada puesta a lo lejos. Esta fue mi primera impresión. Pasados esos instantes, el nuevo papa comienza a hablar y siguen las sorpresas. Primero, recuerda y reza por el papa emérito Benedicto XVI y, después pide a la gente que recen por él, es más pide silencio, inclina la cabeza y está así unos instantes, a continuación pide a todos que recen con él un padrenuestro, un avemaría y un gloria. Y ya en un tono más distendido dice algunas palabras (¡han ido lejos a buscar al nuevo papa!) e imparte la bendición a todos, urbi et orbe. Y sigue en el balcón, ahí manteniendo la compostura y acaba deseando buenas noches y feliz descanso. Esta es la imagen que me hice de los acontecimientos vistos.

Mis impresiones inmediatas fueron estas. Me pareció mayor, asustado, no hecho a la imagen que tenemos del papa. Su cruz pectoral parecía de madera y es como si fuera una persona de andar por la calle. Me sorprendió qué y cómo rezó. Me explico un poco más.

Persona mayor: 76 años, ya es una edad bien avanzada para darse cuenta que las energías pueden ir fallando. Por otro lado, esto garantiza que los años “`para llevar este peso” no pueden ser muchos. Tiene esto la ventaja que deberá tomar decisiones pronto o ya no las tomará.

Persona asustada. No me extraña con la responsabilidad que le ha caído encima.

Persona de andar por la calle. Simplemente lo digo por la imagen que daba en la tv, un tanto regordete. Luego he leído que coge el metro y el autobús. Bueno cogía, podemos decir ya, en Buenos Aires. Y que no vivía en ningún palacio sino en un piso. Me gusta esto.

Francisco. Ese es ya su nombre. ¡¡Cómo me gusta!! Tengo que confesar que cuando leía que uno de los papables era el capuchino cardenal de Boston, pensaba que si era elegido, podría tomar el nombre de Francisco, en homenaje a este santo que, se dice, es quien más se ha parecido a Jesucristo, en su forma de vida. Y sin embargo, vaya sorpresa, es elegido un jesuita, pero tomo el nombre de Francisco, otra sorpresa. Agradable.

Qué y cómo rezó. Esto es esencial. Por muchas vueltas que demos a las cosas, siempre llegaremos a lo básico: rezar. Rezar lo que Jesús nos enseñó: el padrenuestro. El avemaría a la Virgen. Y el gloria. No hay nada más sencillo. Ni nada más auténtico. A alguien ya le he oido decir que es un papa santo. Y hacer silencio, porque ahí es donde nos encontramos muy cerca con Jesús. El nuevo papa, hizo silencio. Fue solo un gesto. Pero lleno de contenido. 

Esta reflexión no tiene otro valor que escribir y reflejar mi primera impresión. Sin más. Orar. Simpre orar.

H y MN

miércoles, 13 de marzo de 2013

DESPERTAR





Para despertar, busca toda la ayuda que puedas, lee los libros que encuentres, asiste a los encuentros que te inviten, medita, respira y espera. Todo ayudará…, pero finalmente solo tú harás la alquimia, pues nada puede precipitarla, solo tu intención de que suceda. Y aún si no hicieras nada de nada, espera tranquilo, igual ocurrirá...

Si ya has despertado y ves cómo duermen los demás a tu alrededor, entonces camina en puntillas, respeta su sueño y descubre la perfección de sus propios tiempos, así como fueron perfectos los tuyos.

Cuando ellos abran sus ojos, el fulgor de tu brillo los ayudará a despertar sin necesidad que hagas nada. Si aún duermes, relájate y disfruta tu sueño, estás siendo arrullado y cuidado.

Despertar no es un acto de magia, aunque llenará de magia tu vida.

Despertar no tiene nada que ver con tu mundo externo, aunque todo lo que te rodea parecerá tener un nuevo brillo.

Despertar no cambiará tu vida, si bien sentirás que todo ha cambiado.

Despertar no borrará tu pasado, pero al mirar atrás lo percibirás como la historia de alguien muy querido que aprendió muchas cosas, y sentirás que ese alguien ya no eres tú.

Despertar no despertará a tus seres queridos, pero ellos se verán mas divinos ante tus ojos.

Despertar no sanará todas tus heridas, pero ellas dejarán de gobernarte.

Despertar no solucionará tu situación financiera, pero te sentirás millonario.

Despertar no te hará más popular, pero ya no volverás a sentirte solo.

Despertar no te embellecerá ante los ojos de los demás, pero te hará perfecto ante tu propia mirada.

Despertar no te dará mas poder, pero descubrirás el poder que tienes.

Despertar puede que no disuelva los barrotes de tus cárceles, pero te dará la libertad de ser tú mismo.

Despertar no cambiará el mundo, te cambiará a ti.

Despertar no quita responsabilidad, muy por el contrario te dará conciencia de las consecuencias de tus actos y elecciones.

Despertar no te hará tener siempre la razón, más bien ya no sentirás deseos de tenerla.

Despertar no traerá caudales de amor a tu vida, descubrirás que ese caudal habita en ti.

Despertar tiene poco que ver con lo que imaginas y tiene todo que ver con el amor.

Despertar es amarte a ti mismo, con tus límites y con tus experiencias, es amar al otro como parte de tu ser y es amar a la existencia... Sí, amar esta bella vida tan sorprendente y variada en todos sus matices.

Permítete disfrutar de la experiencia de ser el maravilloso Ser que ya eres. Tu vida es un acto sagrado pues es la creación del Dios que hay en ti.



(Anónimo)

martes, 12 de marzo de 2013

DIOS GUÍA A LA IGLESIA



Casa Espiritualidad PP Dominicos Virgen del Camino
Hoy martes 12 de marzo, cuando comienza el cónclave, volvemos a recordar a Benedicto XVI, reproducimos algunas de sus palabras dichas horas antes de ese 28-2-202 a las 20:00 horas, momento desde el que está vacante la sede de Pedro, para ahondar en este papa que, con palabras de Manuel María Bru Alonso, es un "papa místico": "llegó como un místico, ejercició el pontificado de un místico y lo deja como un místico. Y en el místico se unen dos cualidades: la contemplación cercanísima del misterio de Dios y el hálito que esa experiencia emana al exterior a través de sus gestos y sus palabras. El místico es un apasionado de Dios". Pues bien, dijo Benedicto XVI:  

 "En estos últimos meses he sentido que mis fuerzas han disminuido, y he pedido a Dios con insistencia, en la oración, que me ilumine con su luz para hacerme tomar la decisión más justa, no para mi bien, sino para el bien de la Iglesia. He realizado este paso con plena conciencia de su gran gravedad y también novedad, pero también con una profunda serenidad de ánimo”.


“Amar a la Iglesia --concluyó sobre el tema- significa también tener el coraje de hacer elecciones difíciles, sufridas y poniendo siempre delante el bien de la Iglesia y no a nosotros mismos”.


“No regreso a la vida privada –precisó-- ni a una vida de viajes, reuniones, recepciones, conferencias, etc. No abandono la cruz, sino que permanezco de un modo nuevo ante el Señor Crucificado. No llevo ya la potestad del oficio en el gobierno de la Iglesia, sino en el servicio de la oración”.


“¡Queridos amigos y amigas! Dios guía a su Iglesia, la sostiene siempre, y especialmente en los tiempos difíciles. Nunca perdamos esta visión de fe, que es la única visión verdadera del camino de la Iglesia y del mundo”.

¡¡Dios iluminará a los cardenales en el ejercicio de su voto para elegir nuevo papa!!. Sin duda.

lunes, 11 de marzo de 2013

LA FE NECESITA TIEMPO Y SILENCIO



Hay cosas que requieren su tiempo. Como un buen plato, que no se puede cocinar forzando el fuego. Como el deporte de élite, que requiere años de ejercicio para alcanzar la excelencia. Como el verdadero estudio que no entiende de atajos. Hay aspectos de la vida que piden calma, sosiego y la maduración lenta que da el tiempo y el criterio. También la fe es así. Necesita irse posando, ir encontrando formulaciones. Ir ganando en hondura y despojándose de adherencias que no aportan nada. Ir cuajando en unas pocas palabras auténticas sobre las que se levanta un edificio capaz de albergar la vida con toda su complejidad: tormentas, alegrías, aciertos, personas, proyectos, preguntas…
pastoral sj

domingo, 10 de marzo de 2013

¿QUIÉN SOY YO?


El hijo pródigo, Rembrandt

Domingo IV de Cuaresma
Evangelio de Lucas 15, 1-3.15-32

En aquel tiempo, se acercaban a Jesús los publicanos y los pecadores a escucharlo. Y los fariseos y los letrados murmuraban entre ellos:

― Ese acoge a los pecadores y come con ellos.

Jesús les dijo esta parábola:

Un hombre tenía dos hijos; el menor de ellos dijo a su padre:

― Padre, dame la parte que me toca de la fortuna.

El padre les repartió los bienes.

No muchos días después, el hijo menor, juntando todo lo suyo, emigró a un país lejano, y allí derrochó su fortuna viviendo perdidamente.

Cuando lo había gastado todo, vino por aquella tierra un hambre terrible, y empezó él a pasar necesidad.

Fue entonces y tanto le insistió a un habitante de aquel país, que lo mandó a su campo a guardar cerdos. Le entraban ganas de llenarse el estómago de las algarrobas que comían los cerdos; y nadie le daba de comer.

Recapacitando entonces se dijo:

― Cuántos jornaleros de mi padre tienen abundancia de pan, mientras yo aquí me muero de hambre. Me pondré en camino adonde está mi padre, y le diré: “Padre, he pecado contra el cielo y contra ti; ya no merezco llamarme hijo tuyo: trátame como a uno de tus jornaleros”.

Se puso en camino a donde estaba su padre: cuando todavía estaba lejos, su padre lo vio y se conmovió; y echando a correr, se le echó al cuello y se puso a besarlo.

Su hijo le dijo:

― Padre, he pecado contra el cielo y contra ti; ya no merezco llamarme hijo tuyo.

Pero el padre dijo a sus criados:

― Sacad enseguida el mejor traje y vestidlo; ponedle un anillo en la mano y sandalias en los pies; traed el ternero cebado y matadlo; celebremos un banquete; porque este hijo mío estaba muerto y ha revivido; estaba perdido y lo hemos encontrado.

Y empezaron el banquete.

Su hijo mayor estaba en el campo.

Cuando al volver se acercaba a la casa, oyó la música y el baile, y llamando a uno de los mozos, le preguntó qué pasaba.

Este le contestó:

― Ha vuelto tu hermano; y tu padre ha matado el ternero cebado, porque lo ha recobrado con salud.

El se indignó y se negaba a entrar; pero su padre salió e intentaba persuadirlo.

Y él replicó a su padre:

― Mira: en tantos años como te sirvo, sin desobedecer nunca una orden tuya, a mí nunca me has dado un cabrito para tener un banquete con mis amigos; y cuando ha venido ese hijo tuyo que se ha comido tus bienes con prostitutas, le matas el ternero cebado.

El padre le dijo:

― Hijo, tú estás siempre conmigo, y todo lo mío es tuyo: deberías alegrarte, porque este hermano tuyo estaba muerto y ha revivido, estaba perdido, y lo hemos encontrado.


Este es de esos textos, tan conocidos, que al leerlo de nuevo podemos caer en la evasión de la falta de atención. Otra vez el mismo texto, podemos pensar. Pero, es tan rico y acierta a tocar, tan bien, lo más importante de los comportamientos, que, cada vez que lo meditamos, nos va a llevar por caminos nuevos. Se conoce con varios nombres:

Parábola del hijo pródigo, para destacar la acción del hijo menor: se marcha de casa y no le va bien; decide regresar porque sabe que allí está la paz, el amor, el bien: su padre. Es Dios. Es él mismo, que mira a su interior y dice: ¿qué hecho?, ¿Por qué busco fuera? Es en mi interior donde tengo que indagar.

Parábola de los dos hermanos, para destacar los comportamientos tan distintos de los dos. El hermano menor, el loco que se va y no le pone freno nada, el despilfarrador que solo quiere “pasarlo bien”. ¡Qué engaño! Solo hay humo. Y cuando se da cuenta, se siente vacío. Y el del hermano mayor: el que está siempre ahí, pero siempre enfadado, sin saborear las cosas, sin generosidad. Todo lo quiere para sí, es el aparentemente bueno, pero es todo un fariseo: es el que cumple y miente. Es el comportamiento más rechazable porque es el de los engreídos y el de los que se creen superiores a los demás. ¡¡Cuidado!! Todos tenemos comportamientos de ambas actitudes.

Parábola del padre bueno, para destacar la acogida del padre: recibe a quien se ha ido y vuelve con las manos vacías. No pregunta qué has hecho, por qué has vuelto, ni recrimina su actuación. Al contrario, acoge, abrazo e integra. Es el comportamiento auténtico, porque es el del amor, el de la acogida. Es el comportamiento del cristiano de verdad. Por eso, se dice también, que ese padre es el mismo yo, soy yo cuando me doy cuenta que el verdadero amor comienza en aceptarme, en quererme, en valorarme porque sólo desde ahí será capaz de amar, querer, valorar y acoger a los demás.

Queridos amigos, el evangelio cada día nos trae una novedad, porque es tan rico que nunca seremos capaces de alcanzarlo por completo. En esta parábola está la esencia de la persona, la esencia del cristianismo, está el mismo Jesucristo y estamos cada uno de nosotros. Hagámosla oración. Hagámosla vida.

Aquí estoy, mi Dios, desconcertado,

¿quién soy?

¿el hijo menor? Hay veces que sí,

¿el hijo mayor? También, también, a veces

Y cuando lo pienso, ¿cómo me duele?

¿pero, soy también el padre?

¿puedo ser el padre?

Y, oigo, en un susurro:

Sí, claro que sí,

Cuando te quieres,

Cuando amas,

y eso me llena.

Hijo pródigo, detalle del hijo menor y del padre, Rembrandt

sábado, 9 de marzo de 2013

EJERCICIOS ESPIRITUALES



Organizados por la Diócesis de León a través de la Delegación de Pastoral Familiar y se celebrarán, Dios mediante, los Ejercicios Espirituales Diocesanos para matrimonios los días 16 (Sábado) y 17 (Domingo) de Marzo del año en curso en el Monasterio de Santa María de Carbajal (Las Carbajalas) situado en la plaza del Mercado de León.

Darán comienzo el día 16 a las 10 de la mañana y terminarán el día 17 a las 6 de la tarde. Quien lo desee puede quedarse a dormir en el Monasterio y quien prefiera ir a dormir a su casa puede también hacerlo.

El coste económico de los Ejercicios es de 30 euros por persona y día ( 30 euros por el Sábado y 30 euros por el Domingo) tanto si deciden quedarse a dormir como si deciden ir a dormir a casa. En el precio está incluido: la comida y la cena del Sábado, el desayuno y la comida del Domingo y la habitación para quien se quede a dormir. Contamos con guardería infantil para facilitar la asistencia de padres con hijos.

Dirigirá los Ejercicios el Padre Claretiano Don Pablo Largo

Facilitamos nuestros teléfonos: 987 22 12 33 y 683 390 365 para que se ponga en contacto con nosotros quien decida participar en estos ejercicios, antes del día 12 de Marzo.

Un cordial saludo.


Los Delegados de Pastoral Familiar:
Antonio Coca Cueto
Arselina Riega Flecha

viernes, 8 de marzo de 2013

EN EL DÍA DE LA MUJER TRABAJADORA

En la Plaza de la Santa Ana (León), de Ana, encontramos este cartel que hoy día de la mujer trabajadora compartimos con todos los internautas.



Y para destacar la dulzura, el buen hacer, la ternura, el esfuerso, la cercanía...y tantos valores que encarnan tan bien tantas mujeres, vaya esta canción en homenaje a quienes a lo largo de la historia, muchas veces, lo han tenido difícil.



jueves, 7 de marzo de 2013

LA LEY NATURAL




Cuando recordamos los conflictos que hubo con Galileo (sobre si el sol giraba en torno a la Tierra o al revés) y con Darwin (sobre el evolucionismo y la interpretación del Génesis sobre la creación) vemos que costó inicialmente sacar consecuencias. Pero hoy ya resulta evidente y todos coincidimos en que “no hay astronomía ni biología religiosas”. Todos hemos comprendido que la Biblia no es un libro de ciencia sino un libro que nos transmite un mensaje de amor y de fe.

Con la moral debe suceder lo mismo: Fundada igualmente en la creación, descubrir las leyes morales es tarea humana. No exige distinguir entre creyentes y ateos, lo bueno y lo malo ha de ser bueno y malo para todos, no sólo para los creyentes. Más bien pide trabajo común en busca de resultados comunes. Todos juntos, sin exclusiones, hemos de buscar el bien. Esto es lo que estudia la Ética como ciencia y lo que significa la autonomía de la Moral.

En ética o moral no cabe hablar de “ley natural” sino de “leyes humanas” que interpretan dinamismos naturales, cuyo verdadero sentido ético debemos descubrir nosotros. (Rev. Concilium nº 336, Pág. 396)

Hoy vemos que muchos avances conquistados por la ciencia no resultan tan fácilmente asumibles para la moral. Pero no debemos dar la espalda a la Ciencia, porque cualquier progreso humano constituye una prolongación de la acción creadora y salvadora de Dios.

Un abrazo

Huellas

miércoles, 6 de marzo de 2013

PARA, RESPIRA HONDO



Qué difícil es encontrar calma en medio de nuestra vida en la que todo es inmediato, efímero y cambiante Vivo a toda velocidad. Viajo en un AVE vital, en el que cada jornada está llena de nombres, noticias, citas, estímulos… una vida en la que todo se vuelve urgente y, de algún modo, fugaz. La memoria no da abasto, a la hora de almacenar tantos mensajes, tantas propuestas, tantas posibilidades. Necesito frenar, desconectar en algún momento de tanta energía, tanta velocidad, tanta inmediatez. Hacer silencio, respirar hondo, volverme, en oración, hacia muy dentro y muy fuera. Escuchar. Hacer paz.
Pasroral sj

martes, 5 de marzo de 2013

LA JOVEN NOVIA


Dos monjes estaban peregrinando de un Monasterio a otro y durante el camino debían atravesar una vasta y escarpada región.

Un día, tras un fuerte aguacero, llegaron a un punto de su camino donde el sendero estaba cortado por un riachuelo convertido en un torrente a causa de la lluvia. Los dos monjes se estaban preparando para vadear, cuando se oyeron unos sollozos que procedían de detrás de un arbusto. Se acercaron y vieron que se trataba de una muchacha que lloraba desesperadamente. Uno de los monjes le preguntó cuál era el motivo de su dolor y ella respondió que, a causa de la riada, no podía vadear el torrente sin estropear su vestido de boda y al día siguiente tenía que estar en el pueblo para los preparativos. Si no llegaba a tiempo, las familias, incluso su prometido, se enfadarían mucho con ella.

Uno de los monjes no titubeó en ofrecerle su ayuda y, bajo la mirada atónita del otro religioso, la cogió en sus brazos y la llevó al otro lado de la orilla. Allí la dejó, deseándole suerte, y cada uno siguió su camino.

Al cabo de un rato, el otro monje comenzó a censurar la actitud de su compañero, especialmente por el hecho de haber tocado a una mujer, infringiendo así uno de sus votos. Pero el monje acusado huía de las discusiones y ni siquiera intentó defenderse de las críticas. Éstas prosiguieron hasta que los dos religiosos llegaron al Monasterio. Se presentaron ante el Abad y el segundo monje se apresuró a relatar al superior lo ocurrido en el río y a acusar vehementemente a su compañero.

Tras haber escuchado los hechos, el Abad sentenció: "Él ha dejado a la muchacha en la otra orilla, ¿acaso tú, aún la llevas contigo?".


Marc E. Boillat de Corgemont Sartorio, abogado internacionalista, doctorado en antropología criminal psicoanalítica, escritor y periodista.

lunes, 4 de marzo de 2013

RETIRO ANUAL: TODO ESTO PARA ACTUAR EN EL MUNDO



Recién llegados de la Casa de Espiritualidad de La Virgen del Camino nos ponemos a darle forma de palabra al retiro anual que el sábado y el domingo hemos estado “disfrutando”, en compañía de los equipistas de León.

La parábola del “Padre bueno” parece una fuente inagotable para profundizar en el hondo del alma. D. Juan Manuel Viejo, fue indagando, en las actitudes de los protagonistas de esta parábola.


 
El título común de las meditaciones delata por donde quería trascurrir el director: “fortalecer nuestra fe en el encuentro con el Señor” ¿Qué se va a escuchar en un retiro? Fundamentalmente de la fe, necesitada de esperanza y adobada de amor.

“Reconoce que Dios te anhela”, esa fue su primera meditación. Y desde ahí ya te ha enganchado. Sabes que Dios te reconoce. Y en ese verbo –reconocer- hay toda una sabiduría. Dios, que es absoluta, reconoce a cada una de sus criaturas en libertad. Ahí la grandeza y la humildad de Dios. Todas las personas somos seres reconocidos por Dios. ¡¡Qué maravilla!! Es el padre bueno que a lo lejos ve a su hijo pródigo y corre a abrazarle porque le ha reconocido. Ni siquiera es necesario decirle a Dios lo mal que hayamos podido hacerlo: él está siempre con los brazos abiertos, nos reconoce, nos anhela.


 
“Levántate y ve al Padre”. En esta frase está la segunda actitud. Aquí es necesario que miremos a Dios, que le hagamos un gesto, que de alguna manera dejemos saber que queremos estar con Él. Hace falta poco, pero es necesario ese poco para no ahogar la libertad. D. Juan insistió en ponerle pasión a la vida. No ir por ahí de manera indiferente, como que las cosas no van con nosotros. Ningún ser humano nos puede dejar indiferentes. Porque todos somos imagen de Dios. Es necesario poner corazón, sentimiento, emoción. Sin ellos la vida se vuelve vacía.

“Cree que tu Padre te ama”. Hay amigo, aquí hay generosidad de Dios, humildad de Dios, cariño de Dios. Y esto a nadie le puede dejar indiferente. Dios –el más grande, al absoluto, el amor en esencia- me ama a mí, a ti, a todos. Y esto ya es lo máximo. Por eso es necesario insistir en ello: en creer que Dios nos ama. Porque, lo hemos oído tantas veces, que somos indiferentes a esta gran verdad. A la verdad. Que Dios nos ama. El decálogo del amor sirvió para que, en pareja, rumiásemos esta verdad esencial.


 
Durante la penitencia y la eucaristía, de nuevo la misma parábola del padre bueno, sirvió, en esta ocasión, para poner de manifiesto la actitud del hijo mayor. Es el lenguaje del que no está a gusto, es el comportamiento del que lo quiere todo para él, es la envidia, son los celes, es el señalar con el dedo a quienes se apartan del camino establecido, es el cumplimiento (el cumplo y miento), es la actitud de los fariseos. Ese hermano mayor, que parece el bueno, que nunca se ha separado del padre, que cumple con sus deberes sin amor, es la actitud de los falsos. Son las personas vacías, egoístas, las que buscan solo la seguridad de la ley “para salvarse ellos solos”. ¡¡Menuda lección!! Y parecía el bueno. Son los que nunca arriesgan, los que no meten la pata, los que parece que todo lo hacen bien. Son los que no aman. Y, por eso, les falla lo esencial. Porque seguir a Jesús es amar.

“Reconoce que tu Padre te acepta”, es otra actitud a tener en cuenta. El sabe de nuestras limitaciones, de nuestros fallos, de nuestras debilidades. Y cuenta con ellos. Por tanto, no hace falta aparentar lo que no somos. Somos débiles, llenos de defectos, pero capaces de amar y de pedir perdón. Y esta es la grandeza. Que Dios nos ama y nos perdona. Echemos de nuestra vida lo soberbia y aceptemos nuestra condición con humildad. Desde ahí es posible pedir y recibir perdón. Amar, aceptación y perdón. Las tres nos conducen a ser auténticos. A abrir el corazón.

“Alégrate con tu Padre”. Porque somos seres afortunados. Somos conscientes de que tenemos fe, que Dios nos quiere, que nos perdona. Hagamos nosotros lo mismo. No echemos tierra a la vida. Vayamos con una sonrisa. La sonrisa de la felicidad de quien sabe amar y se siente amado. Aún en las dificultades.

Todo ello fue regado con abundantes presentaciones, en oración a Dios con los salmos y sintiendo al Padre en el silencio.


 
¿Y ahora qué? Ahora a hacer vida lo vivido. No hemos ido a teorizar. Fuimos a llenarnos de Dios, para que nos sea más fácil la vida de cada día. En casa, en el trabajo, en la sociedad, en el equipo. Que se note. Que no haya sido indiferente este tiempo. Es nuestro momento. En el mundo. Es ahí donde tenemos que hacer realidad estas actitudes. Allí, recogidos, en silencio, con los amigos, es muy fácil. Lo más grande, lo más bello es sentir a Dios en quien nos es desconocido, pero que ha pasado a nuestro lado. Ahí, nuestra seguridad se tambalea. Nuestra fe se pone en duda.

¿Para qué me voy a complicar? Para ser auténtico, para ser cristiano. Es el momento de vivir en el mundo como matrimonios cristianos.

Un abrazo

H yMN