Jesús siempre estaba de camino y quería
explicarnos lo que era el Reino, y nos pide que en ese Reino seamos fermento. ¿Cómo
podemos ser fermento en la masa de la Iglesia?
La levadura es fundamental, sin ella la
masa no se transforma, pero no es condición suficiente. La Iglesia, la masa,
tiene que poner su parte para el éxito de todo esto.
Para ello hemos de recordar que en la
Iglesia, hombres y mujeres somos iguales, somos la masa y hemos de trabajar
juntos, como en el matrimonio.
Todos nos necesitamos tanto en las
iglesias locales como en la general y entonces seremos auténtico fermento que
hará crecer en el mundo el Reino de Dios que no es otro que el Reino del amor.
Avancemos juntos paso a paso.
Un abrazo
Huellas
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